Es hora de recapitular las hostias que me ha dado el mundo...
Ha sido el mejor año de mi vida, eso no me lo quita nadie, lleno de puntos altos, excitación máxima, conciertos, sobrino, amigos, dolor, campeonatos, música, toqué el Paraíso con las manos y bajé a los infiernos... y, al final, todo está casi como cuando empezó, con una que otra cana, más cicatrices en el corazón, ganas y más ganas de cerveza, necesidad de olvidar, necedad de recordar. A fines del 2006 mandé un e-mail a los panas en el que, entre otras cosas, les deseaba que los gatos (o las gatitas) que bajen de los tejados en noches frías, sean expertos en el arte de calentar; que quienes cargan con un corazón roto encuentren curitas, aunque sea temporales, en labios seductores; que los besos sean sólo besos y todo besos; que sepamos que no hay finales felices, pero no por eso debemos dejar de arriesgar; que no evitemos esos dolores del cuerpo que conllevan dolores del corazón; que sepamos cómo responder a esos guiños detrás de un par de lentes; que la piel roce otra piel y de tanto roce se quede con el perfume; que seamos más guapos e irresistibles que nunca; que no evitemos ni el dolor ni las cicatrices que nos toca tener; que salten más botones y se abran más cierres; que nos quitemos la ropa más seguido. Vaya si se me cumplieron mis buenos deseos...
Ha sido el mejor año de mi vida, eso no me lo quita nadie, lleno de puntos altos, excitación máxima, conciertos, sobrino, amigos, dolor, campeonatos, música, toqué el Paraíso con las manos y bajé a los infiernos... y, al final, todo está casi como cuando empezó, con una que otra cana, más cicatrices en el corazón, ganas y más ganas de cerveza, necesidad de olvidar, necedad de recordar. A fines del 2006 mandé un e-mail a los panas en el que, entre otras cosas, les deseaba que los gatos (o las gatitas) que bajen de los tejados en noches frías, sean expertos en el arte de calentar; que quienes cargan con un corazón roto encuentren curitas, aunque sea temporales, en labios seductores; que los besos sean sólo besos y todo besos; que sepamos que no hay finales felices, pero no por eso debemos dejar de arriesgar; que no evitemos esos dolores del cuerpo que conllevan dolores del corazón; que sepamos cómo responder a esos guiños detrás de un par de lentes; que la piel roce otra piel y de tanto roce se quede con el perfume; que seamos más guapos e irresistibles que nunca; que no evitemos ni el dolor ni las cicatrices que nos toca tener; que salten más botones y se abran más cierres; que nos quitemos la ropa más seguido. Vaya si se me cumplieron mis buenos deseos...
El mejor año de mi vida, dije clarito, para muestra, tres puntos imprescindibles:
La música encuentra como el gran tema a Colin Hay con su terrible I just don't think I'll ever get over you, tan presente desde el primer día, tan presente cuando cumpla 102 años, seguido por Fabiana Cantilo y su Nada es para siempre que tanto se aplica... El disco que se robó toda mi atención y mi pasión, en las voces alcoholizantes de Bunbury y Vegas, El tiempo de las cerezas, obra maestra del feeling, el lirismo y la musicalidad. Por el mismo camino apareció la revelación y descubrimiento máximo, Nacho Vegas... para muestra, qué mejor botón que Ocho y medio... Pero lo más grande de la vida fue el concierto de Soda... ¡¡¡Los vi volver!!!... el mejor concierto de la historia y una aventura irrepetible... ahora Soda también duele tanto. No hay que olvidar que Serrat y Sabina se juntaron por acá aunque quedaron debiendo un poco.
En los deportes me vi levantando copas, las más importantes a las que puedo aspirar. Kimi se aprovechó de la incompetencia de los zoquetes de McLaren y, gracias a su talento, cerró su temporada celebrando el título con ese triunfo en Interlagos. ¡Grande Ferrari! La novena estrella se colgó sobre la U tras pasarle por encima a todos los equipos del país... A los años que volví al estadio, lo máximo, aunque haya sido un magro empate con el Cuenca... Y no fui a la goleada tricolor contra Perú.
Además, varias lágrimas cayeron frente a las pantallas, principalmente gracias a The english patient y a The notebook (¿algún problema?). No hay que olvidar a Gegen die wand, Das leben der anderen, El baño del Papa, Hamaca paraguaya, Reconstruction, The piano...
La música encuentra como el gran tema a Colin Hay con su terrible I just don't think I'll ever get over you, tan presente desde el primer día, tan presente cuando cumpla 102 años, seguido por Fabiana Cantilo y su Nada es para siempre que tanto se aplica... El disco que se robó toda mi atención y mi pasión, en las voces alcoholizantes de Bunbury y Vegas, El tiempo de las cerezas, obra maestra del feeling, el lirismo y la musicalidad. Por el mismo camino apareció la revelación y descubrimiento máximo, Nacho Vegas... para muestra, qué mejor botón que Ocho y medio... Pero lo más grande de la vida fue el concierto de Soda... ¡¡¡Los vi volver!!!... el mejor concierto de la historia y una aventura irrepetible... ahora Soda también duele tanto. No hay que olvidar que Serrat y Sabina se juntaron por acá aunque quedaron debiendo un poco.
En los deportes me vi levantando copas, las más importantes a las que puedo aspirar. Kimi se aprovechó de la incompetencia de los zoquetes de McLaren y, gracias a su talento, cerró su temporada celebrando el título con ese triunfo en Interlagos. ¡Grande Ferrari! La novena estrella se colgó sobre la U tras pasarle por encima a todos los equipos del país... A los años que volví al estadio, lo máximo, aunque haya sido un magro empate con el Cuenca... Y no fui a la goleada tricolor contra Perú.
Además, varias lágrimas cayeron frente a las pantallas, principalmente gracias a The english patient y a The notebook (¿algún problema?). No hay que olvidar a Gegen die wand, Das leben der anderen, El baño del Papa, Hamaca paraguaya, Reconstruction, The piano...
¿Y yo? Mi año comenzó mejor que nunca. La primera guitarreada me encontró tocando Desconfío en la guitarra mientas la Ale Bayas me acompañaba con un solo de teclado. Después llegué a pensar que podría pagar un rescate imposible. Empeñé hasta los lentes, rompí el chanchito y disfruté de más o menos 3 meses de ensueño, pero estaba claro que lo único que hacía era preparar mi cama de fakir, con un colchón que duele hasta ahora. Volví a la bebida justo a tiempo para festejar la llegada de André, el primer nieto de mis padres. Ahora que ya lo conocí, puedo asegurar que es el niño más lindo del mundo. Más y más alcohol, más y más música y un poco de humo de los tabacos de las demás... Y lo demás... mucho amor. Le dije a una mujer que la amo... otra mujer me dijo que me ama... Naturalmente, ninguna de las dos se quedó conmigo, así que no me vengan con esa patraña de que el amor es más fuerte... ni el que siento yo ni el que sienten por mí... Es así como tenía que ser. Fue demasiado... ahora quiero el olvido... Y es que no puedo dejar de pensar en tanto que pudo haber sido, pero es peor con lo que sí fue. Ahora cargo toda una pesada flota marina sobre mis hombros... Conste que yo no lo pedí... Igual quedaron los besos de las buenas noches, las parejas de gatos, los maravillosos jueves en compañía...
Y sin embargo, fui el rey del mundo en una tarde de enero, con los 19 días que le siguieron. Quinientas noches no bastarán jamás para recuperarme...
Pues si esta ha sido el mejor año de tu vida que el 2008 le haga competencia. que le sentimiento siempre te entre por las venas, que jamás tengas un colchon sin estrenar y que tus fantasmas no te estorben. Que como subas bajes. que como ganes pierdas... pero sobretodo que vivas...
ResponderBorrarque vivas muy intesamente. besos y brazos desde esta cuidad que es la tuya donde el sol siempre quema.
ResponderBorrar¡¡¡¡¡GRACIAAAAAAS!!!!! Es de lo mejor que me han deseado para el 2008. Con la misma moneda pago y te deseo el doble de lo que me deseas.
ResponderBorrarNo sé si se le podrá hacer la competencia al año que se acaba... estaba dándome cuenta que perdí un par de cosas que ahora lucen irrecuperables... Pero bueno, nadie ha muerto todavía y yo sigo aquí, con ganas de una cerveza más...
Gracias desde mi ciudad, que siempre te recibirá con su sol que quema y los brazos abiertos.
¡¿Cómo se me pudo haber olvidado?! Dos de las películas que más me gustaron fueron The pillow book y Garden State. La primera cumplió las expectativas que ella me creó al respecto, y la segunda es una de esas que, no sé bien por qué, tengo que volver a ver unas mil veces...
ResponderBorrarpues me quede sin ver the pillow book... por aca es más complicado lo de conseguir pelis. acabo dellegar mi destino gracias por tus deseos espero que si algun día voy por la mitad del munto de nuevo nos podamos por fin cocer persona a persona besos desde bogotá 2600 mts más cerca de las estrellas
ResponderBorrarHabía escrito un mensaje per se borró porque está sobrecargado el blogger... :(
ResponderBorrarAhora me da pereza escribir todo de nuevo. Lo más importante es que agradezco mucho tus saludos y deseos para el 2008, que me llegan al corazón, y que me encanta saber que quedan personas que se arriesgan a amar, que no tienen miedo a amarr, aunque pueda doler después. Me gustaron mucho frases como "que los besos sean sólo besos y todo besos" y "que los gatos (o las gatitas) que bajen de los tejados en noches frías, sean expertos en el arte de calentar". Muchas gracias de verdad.
Que tengas un muy buen año tú también. Que se te conceda el olvido que tanto deseas. O que la necedad de recordar no duela tanto, que tampoco sirve de nada borrar todos los recuerdos, bastaría con anestesiarlos...
Me hubiera gustado leer lo que escribiste antes, más largo y con más tiempo... ya ni modo, cosas de la tecnología. Pero bueno ¡felicidades para todos y todas!
ResponderBorrarY ojalá este año sí cumpla con mi promesa de escribir aunque sea un post sobre todo este trauma del olvido...
vale, aprendí la lección y estoy escribiendo en el block de notas, para luego pegarlo en el post, así en caso de que se borre, tengo el respaldo acá. :)
ResponderBorrarBásicamente te comentaba que hace unos meses llegué a tu página, no sé bien por qué. Creo por un link de gustaveo, el de los discos... no sé. Pero llegué a tu página y me gustó mucho. No te escribí nada en ese entonces, pero ayer, al volver a entrar y mirar el post, que te dije, me llegó al corazón, no pude dejar de escribirte. No me suele pasar de encontrarme con blogs con los que sienta que comparta tantas cosas, y por lo que dices, siento que comparto muchas cosas. Por eso me gustó mucho. Los gustos musicales, los sentimientos, son muy parecidos. Se me hace cercano. También descubrí a Nacho Vegas hace poco, y me gusta tanto como Bunbury...
me gusta el gato que pusiste en blog... está buenísimo.
Pero no uso lentes... me hubiera gustado mucho sentarme a conversar una cerveza contigo. chau gato...
me encanta tu gato....
ResponderBorrar:) Qué bueno que les haya gustado mi gato.
ResponderBorrarY bueno, los lentes nunca serán impedimento para una cerveza.